Refrigerante, la estrella del verano
El refrigerante es un líquido muy importante en el funcionamiento del motor de nuestro vehículo para que no alcance una temperatura alta. Los motores de combustión necesitan tener una temperatura óptima y constante para funcionar sin que se produzca un sobrecalentamiento que conlleve averías importantes del motor, sobre todo con el calor del verano.
Una de las utilidades del refrigerante es conservar las propiedades del aceite como lubricante. Impide espumas, cavitaciones, la erosión y además protege al motor frente a la corrosión.
Refrigerante ¿Es lo mismo el anticongelante y el refrigerante?
El líquido refrigerante tiene la propiedad de ser anticongelante. Está compuesto de agua destilada y si bajan mucho las temperaturas, se podría congelar y no podría llevar a cabo su cometido.
¿Podemos utilizar solo agua para refrigerar el motor?
El agua es corrosiva, por tanto no es una buena opción especialmente si es del grifo. Además, su punto de ebullición es de 100ºC y se congela a 0ºC.
Propiedades del refrigerante
– Una de las cosas que debemos tener en cuenta para comprar un refrigerante es que su temperatura de congelación sea lo más baja posible. De esta forma no aumentará su volumen cuando haga frío y no se romperá el circuito de refrigeración. La temperatura de ebullición ha de ser superior a la del motor para que conserve sus propiedades sin desintegrarse.
– Ha de ser antiincrustante y anticorrosivo.
– Debe ser muy poco viscoso para que fluya con facilidad.
¿Qué refrigerante es el más adecuado?
Los podemos encontrar inorgánicos y orgánicos. Los orgánicos duran más tiempo y, a diferencia de los inorgánicos, no utilizan silicatos sino aditivos mucho más duraderos y versátiles. Protegen mejor contra la cavitación y la temperatura de congelación es más alta.
La efectividad del refrigerante depende de la cantidad de etilenglicol. Puede variar entre un 10 y un 25 %, así variará el rango de temperaturas que puede soportar.
¿Cuándo debe sustituirlo?
El líquido se debe sustituir cada dos años para que no pierda sus propiedades anticongelantes y corrosivas. Para cambiarlo es muy importante que el circuito esté completamente vacío y debería realizarlo un mecánico profesional.
Es importante que no se rellene, porque si juntas dos líquidos con propiedades diferentes se puede generar una pasta sólida que obstruya el circuito.
Si puedes rellenarlo con el mismo líquido, no lo hagas con el motor caliente y abre el tapón poco a poco para que se produzca una descompresión gradual.
Consejos sobre su utilización
– Respeta los kilometrajes y los plazos máximos que indican los fabricantes.
– No mezcles nunca el refrigerante con agua u otros líquidos que alteren sus propiedades originales.
– Cuanto mayor sea la calidad del líquido, mejor funcionará.
– Es recomendable revisar el líquido cada 20.000 kilómetros.
El líquido refrigerante es fundamental para la refrigeración del motor del coche.